jueves, 19 de febrero de 2009

Último día en Brno

Acabo de llegar de la última fiesta de esta etapa irrepetible en Brno. Nunca olvidaré todos esos grandes momentos vividos junto a una gente que me ha hecho sentir como si estuviera en mi propio país o, mejor aún, como en mi propia casa. A todos ellos GRACIAS (Děkuju moc).


miércoles, 11 de febrero de 2009

Copa Federación en Brno

Todos con María José Martínez, Lourdes Domínguez y Carla Suárez
Aprovechando cualquier oportunidad de salir en la tele, y viendo que siempre que la selección española iba al extranjero había estudiantes erasmus por allí, nos enteramos que se jugaba justo al lado de la residencia la Copa Federación de tenis.

Lástima que el domingo no ganaran ni un set siquiera, pero la verdad es que aún así nos lo pasamos muy bien animando a nuestras jugadoras.

Inolvidable Grecia (2ª parte)

La aventura comenzó el domingo por la mañana, cuando alquilamos un ford focus y nos dirigimos sin demora hacia Corinto, nuestra primera parada.

En esta primera parada, no vimos absolutamente nada en Corinto y todo fue porque creíamos en un principio que el puente de Río-Antirio estaba en esa ciudad, pero no era así, entonces decidimos poner rumbo a Epidauros, primera ciudad que nos dejó alucinados. Tiene un teatro enorme en el que según nos informamos, si una persona hablaba desde el centro del escenario se escuchaba igual de bien en la primera fila que en la última, gracias a la acústica del lugar. He aquí una muestra.



Una vez vistas el resto de las ruinas de Epidauros, nos dirigimos hacia Nafplio, la ciudad donde en un principio queríamos hacer noche. Allí comimos y luego, fuimos a Micenas, donde tambien hay unas ruinas que supuestamente están muy bien, pero que nos quedamos sin ver, porque cuando llegamos estaba cerrado. Ahí fue donde nos dimos cuenta que en Grecia el horario de todos los monumentos era de 8:30 a 15:00 y decidimos a partir de ahí cambiar nuestra idea primera de dormir en Nafplio y comenzamos uno de los tramos más peligrosos de todo el viaje hacia Olympia. Era una carretera de montaña con muchísimas curvas, y para más inri se puso a llover con ganas y apareció una niebla increíble que nos hacía ir a 20 Km/h, con lo que decidimos parar en el primer pueblo que pillaba de camino, Tripoli.

En Tripoli también fue una odisea encontrar un hotel barato para dormir, pero al final encontramos uno que estaba genial y por 22€ la noche, así que allí que nos quedamos. A la mañana siguiente, por fin llegamos a Olympia, la ciudad donde se realizaron los primeros juegos olímpicos de la historia y donde se conserva muy bien el estadio olímpico de la época. Cómo no, dado nuestro nivel de aburrimiento, y aprovechando que estábamos solos en el estadio, hicimos una carrera, cuyo resultado quedó grabado para la posteridad.



Una vez vista toda la villa olímpica, que contaba con un gimnasio, baños, piscinas, el famoso pebetero y el templo de Zeus, cogimos de nuevo nuestro ford focus con destino a Delfos, no sin antes hacer una parada en Pyrgos para tomarnos un café y en el puente Rio-Antirio, uno de los más bonitos del mundo. En Delfos, como en todas las ciudades a las que llegábamos, tuvimos que buscar un sitio donde dormir, ya que no llevábamos reservado nada de antemano, porque nadie sabía si íbamos a poder llegar a nuestro siguiente destino. Ya por la mañana, vimos el museo y las ruinas, que cuenta con un teatro, un estadio y el oráculo (templo de Apolo), que en un principio no sabíamos que era ese templo y nos hicimos fotos en él, pero fuimos al pueblo después preguntando que dónde estaba el oráculo... que mal quedamos!

Templo de Apolo: Oráculo
Cuando por fin nos dimos cuenta que ya lo habíamos visto todo en Delfos, nos dirigimos hacia el norte, dirección Kalambaka, un pueblo a 5 km de Meteora, y donde haríamos noche. Después de varias horas de camino, vimos una salida de la autopista: Termópilas. Y por supuesto allí que nos desviamos y nos hicimos nuestra foto de rigor con nuestro querido Leónidas.
Termópilas: Leónidas
Proseguimos nuestro viaje y cuando llegamos a Kalambaka, seguíamos con nuestra suerte de encontrar un hotel barato (solo 18€!!) situado cerca de la oficina de turismo y con unas vistas hacia Meteora envidiables.

Vistas desde nuestro Hotel
Meteora lo forman un conjunto de monasterios situados en la cima de unas montañas de piedra con unos acantilados enormes. No sé como se pudieron construir ahí, es algo alucinante. Tuvimos la mala suerte de que el miércoles cerraban casi todos los monasterios así que sólo pudimos ver dos.

Monasterio en Meteora
Y bueno después de Meteora, fuimos dirección al Cabo Sunión a 70 km al sur de Atenas donde dicen que se ve unos de los atardeceres más bonitos.

Cabo Sunión
El último día de viaje, al ver que nos sobraba tiempo, vimos el cabo sounión por la mañana y luego, por fin vimos el canal de Corinto que impresiona al verlo, sobre todo para los que tenemos algo de vértigo...

Canal de Corinto
Y ya a eso de las 16:00 llegamos a Atenas, que es un caos circulatorio, y hasta las 17:30 no pudimos llegar hasta la empresa que nos alquiló el coche. En total fueron unos 1800 km en 5 días! y conduciendo con los locos de los griegos. Si hemos sobrevivido a esto, nada podrá con nosotros!

Al día siguiente, teníamos toda la mañana libre antes de coger nuestro avión, y la aprovechamos para visitar la villa olímpica de Atenas.

Villa Olímpica

sábado, 7 de febrero de 2009

Inolvidable Grecia (1ª parte)

Una vez más he salido encantado de uno de mis viajes. Esta vez ha sido Grecia la que me ha encandilado. Es una maravilla, tanto la gente, sus numerosos monumentos, su comida... y, cómo olvidarme de la compañía que he tenido en este viaje: Dani, Marisa, Tere y Teresa (aunque a María también se le ha echado de menos).

Ha sido una semana llena de aventuras y emociones, comenzando por la forma de conducir de los griegos. Madre mía! Qué locos!!


Desde el momento en que aterrizamos en el aeropuerto de Atenas, sentí que ese iba a ser un gran viaje, que todo iba a salir sobre ruedas y que sería algo para guardar en nuestros recuerdos. Sin embargo, nos dieron la primera en la frente, el supuesto hotel que nos dieron al estar cerrado el albergue que teníamos reservado, era otro albergue. Lo peor de todo no fue eso, sino que nos dieron las peores habitaciones de todo el hotel y daban a una de las calles más transitadas de todo el centro de Atenas y se oían los coches circulando y pitando hasta las 5 ó 6 de la madrugada, a lo que había que añadir que teníamos una farola justo en la ventana y no teníamos cortinas...

Habitación del hotel Fivos 
Bueno después de ese mal rato, ese viernes por la noche salimos, vimos la Acrópolis iluminada y cenamos en una taberna típica griega. Allí fue donde probamos por primera vez la maravillosa cocina griega: moussaka, cordero cocinado de mil maneras, pastitsio, ensalada griega, tzartsiki, souvlaki... y un largo etcétera. De estos platos, a cada cual más bueno os mostraré algunas fotos.

Moussaka y cordero
Ensaladas griegas
Esa noche también celebramos el 22º cumpleaños de nuestra querida Teresa con unos cócteles, que estaban bastante buenos, si no que se lo digan a Tere y a Dani que no se lo pudieron ni beber!




A la mañana siguiente, tras una noche movidita, nos dispusimos a patearnos de arriba a abajo el maravilloso centro de Atenas, que otra cosa no, pero sorprenderme me sorprendió bastante. Quizás pueda ser debido a que en cada monumento que visitábamos estábamos completamente solos y eso hacía que disfrutásemos de ellos más todavía o porque realmente es una ciudad que me encantó. Lo único que sé es que salí encantado con la ciudad y con la aventura que nos dispusimos a comenzar el domingo por la mañana...

Estadio Olímpico

Templo de Zeus
Partenón

Biblioteca Nacional

sábado, 24 de enero de 2009

Berlín & Dresden

Va a ser verdad eso de que un viaje planificado el día de antes es el que mejor sale.

Esta semana pasada viví uno de los mejores viajes que he hecho hasta ahora. El jueves por la mañana conseguimos un coche de 7 plazas (un Opel Zafira) para 5 días, que nos salía a muy buen precio, incluso más barato que ir en autobús con StudentAgency para 6 personas; y por la tarde, despues de varias horas de búsqueda, conseguimos encontrar un albergue para Berlín y otro para Dresden.

Así, el viernes por la mañana a eso de las 10:30 salimos de la residencia para recoger nuestro afamado coche a las 12:00 en el aeropuerto. El viaje no se hizo pesado porque nos fuimos turnando todos para conducir y no tuvimos ningún tipo de problema. También es verdad que si hubiésemos tenido un CD de música hubiera ayudado, porque buscar música en la radio checa o la alemana no es nada fácil... Cuando llegamos a Berlín, a eso de las 19:00, nos desviamos un poco del camino que teníamos que coger dentro de la ciudad, pero con un poco de suerte en dos o tres maniobras dimos con la calle. El albergue estaba bastante bien para mi gusto, aunque es verdad que nos separaron en 2 habitaciones, pero teníamos la planta prácticamente para nosotros solos y las duchas no estaban mal. El único pero que se le podía sacar era que estaba un poco lejos del centro, a 20 minutos de la parada de metro del zoo, pero a decir verdad, para llegar en coche está bastante bien, porque meterse en pleno centro con él sería una locura.

Berlín es una ciudad completamente nueva. Como todos sabemos tras la Segunda Guerra Mundial quedó completamente arrasada, y prácticamente la daban por destruida. Fue gracias a las mujeres de la época que apoyándose en que la puerta de Brandenburgo quedó en pie, la ciudad podía ser reconstruida, y como podemos ver en las fotos así fue.

El antes y el después de la Puerta de Brandemburgo

Monumento a los Judíos

CheckPoint Charlie


Pensando en el Muro de Berlín 
Berlín es una ciudad con mucha historia y una forma de conocer parte de esa historia es hacer alguno de los free tours ofertados. Nosotros hicimos el free tour general el sábado y el domingo el del Tercer Reich, y la verdad es que ayuda mucho a conocer mejor la ciudad y no son nada caros.

Una curiosidad que nos contaron es la historia de los semáforos para los peatones. En la zona comunista se pusieron unos muñequitos con sombrero para representar la clase obrera de aquellos tiempos, y hace unos años se intentaron eliminar de las calles pero la gente se manifestó en masa en contra de la eliminación de los muñecos del semáforo y ahora se han convertido en un perfecto suvenir para todos los turistas.



Tras patearnos Berlín de punta a punta, el martes por la mañana nos fuimos a Dresden, una ciudad pequeñita, pero con mucho encanto y que merece la pena visitar. Eso sí, en unas horas lo puedes recorrer todo, así que no hace falta quedarse más de un día.

Finalmente, pusimos rumbo a casa el miércoles por la mañana bien temprano, para poder llegar a tiempo para devolver el coche antes de las 13:00. Y haste en eso tuvimos suerte, porque llegamos a las 12:20 al aeropuerto y a las 12:35 salía el bus que nos deja en la Hlavní Nádrazí, y en el tiempo que tardaron en revisar en coche, lo cogimos sin problemas.

martes, 13 de enero de 2009

Por fin en Brno, tras una mala experiencia en la T4 de Barajas

El sábado todo parecía que iba a salir redondo, cuando estaba en la cola para facturar, ví la máquina del auto-checkin y lo ví claro, encima me voy a saltar la cola para tener asiento! Así que conseguí mi asiento en los vuelos de Málaga-Madrid (11:20) y Madrid-Viena (15:50) del sábado, y como sólo llevaba equipaje de mano me fui directamente para el control. Eran las 10:40 cuando ya veía por pantalla que el vuelo a Madrid de las 9:30 había sido cancelado y el de las 9:00 estaba embarcando... Ya me empezaba a oler mal la cosa, cuando a eso de las 11:00, anuncian por megafonía que mi vuelo está retrasado porque el avión que viene desde Madrid no ha llegado todavía. Al principio el retraso lo ví algo normal, debido a los problemas que habían tenido por el temporal el día anterior, y tampoco me preocupaba mucho porque tenía tiempo suficiente para coger el de Viena. El avión no salió hasta las 13:30 (2 horas y media de retraso, no está nada mal!!).

Cuando llegué a la T4 de Barajas (14:30), todo parecía que iba a salir redondo porque mi vuelo estaba en pantalla y no tenía ningún retraso, pero sospechaba que al final iba a tener bastante retraso porque todos los vuelos de Iberia estaban retrasados por los supuestos problemas provocados por la nieve. Y así fue, a eso de las 15:00 indican que el vuelo se retrasa hasta las 17:12. A todo esto, yo permanecía ajeno a toda la cola inmensa que había en los mostradores de Iberia y de los problemas que se estaban sucediendo en la terminal 4. Mientras yo esperaba a que informaran de la hora de embarque de mi vuelo sucedieron cosas como estas:




Cancelación de un vuelo Madrid-México y escolta a azafatas de Iberia




Largas colas en el mostrador de Iberia



Más colas en otro mostrador

Y llegó por fin la hora de embarque, las 16:31 ponía en las pantallas, así que me dirijí todo feliz a la puerta K68. Efectivamente a las 16:30 llega el avión, se bajan los pasajeros... y a eso de las 16:50, veo que se acerca un coche al avión y se bajan las azafatas y el piloto... ¿¿¿pero que es esto??? Sí señor la famosa huelga de celo que nos jodió por completo. Claro está que nadie vino a avisar de nada y de repente la pantalla que indica el vuelo en la puerta de embarque se apaga... alguien va a mirar las pantallas de información y ahí está! el vuelo cancelado!!! Así que todos a la cola de atención al cliente de Iberia. Y la cola, como no podía ser de otra forma, la formaban alrededor de 500 personas, pero nos dimos cuenta que encima había dos colas!! una por cada lado del mostrador! Lo que significa que cerca de mil personas estábamos esperando para reclamar.

Total, que fueron 5 horas de espera para llegar al mostrador, aunque como era de esperar, nos dieron una noche en un hotel, el traslado al hotel en bus y una cena, pero por supuesto, perdí el dinero del bus que tenía reservado para volver a Brno. Allí en aquel caos nos conocimos unos cuantos que fuimos juntos al hotel, entre ellos, dos chicas que también venían a Brno, así que por lo menos ya no hice el viaje solo. La cena nos llegó a las 1:00 de la madrugada y el bus de vuelta al aeropuerto salió a las 6 de la mañana así que no tuvimos tiempo apenas para dormir.

A la mañana siguiente, teníamos todos una carita de cansados... pero al fin salió nuestro avión, que iba a reventar de todos los que nos quedamos allí tirados la noche anterior. El vuelo salió con retraso. Supuestamente salía a las 8:50, y despegó a las 9:30, pero ya nos daba igual, lo único que queríamos era despegar y llegar a Viena de una vez!

Al llegar a Viena, como era de esperar también, las maletas de todo el que se quedó tirado en Madrid no llegaron (menos mal que yo no facturé nada) y otra cola para reclamar las maletas. Cansados ya de tanta espera, al salir del aeropuerto vimos que había un bus que te llevaba directo a la estación de tren, y sin dudarlo lo cogimos. En la estación, compramos el primer billete que salía para Brno y por fin a las 18:00 llegué a la residencia, tras 33 horas de viaje!!!


Noticias

jueves, 18 de diciembre de 2008

Día de partida

Mañana vuelvo a casa por navidad. Ya se han marchado casi todos, sólo faltamos algunos españoles y otros que tienen cerca sus casas, como algún esloveno, algún alemán, polacos... pero pocos más. Vinarska se va a quedar más sola que la una, pero en Enero volveremos prácticamente todos de nuevo, así que la recepcionista se librará de nosotros por poco tiempo.

La maleta está prácticamente lista, sólo me faltan por meter algunas cosillas que se quedarán en Málaga.